La cláusula Van Halen
¡Buenos días, profe! 👋 ¿Qué tal?
Quizá, como yo, no sepas quien era Eddie Van Halen, pero creo que su historia nos puede servir para el aula. En caso de ser fan del rock, es más probable que te suene su nombre y su banda: Van Halen.
No te voy a hablar de rock. Tampoco de su música. Y mucho menos de él. Vamos a hacerlo de algo mucho más interesante (al menos para mí): la cláusula Van Halen.
Durante los 70-80 no eran muchas las bandas que se dedicaban a montar mega producciones por diversas partes del mundo. Sí fue el caso de los Van Halen con el montaje de gigantescos escenarios, cientos de luces y un equipo de sonido que no cabía en dos tráilers.
Toda esta parafernalia requería de mucho papeleo. ¡Qué te voy a contar a ti! Largas listas de ítems que marcar, requisitos que cumplir y condiciones a tener en cuenta.
Entre todos estos elementos, concretamente en el artículo 126, se trataba un aspecto a priori insignificante. Decía: “No habrá ningún M&Ms marrón en la zona del backstage, bajo pena de cancelación del concierto y pago total a Van Halen”. Lo curioso es que en la lista de comida sí pedían expresamente un bol de M&Ms, y en mayúsculas y subrayado volvían a repetir el requerimiento.
Durante la gira, uno de sus conciertos fue en Pueblo, Colorado. David Lee Roth, el cantante, entró al backstage y encontró M&Ms marrones en el bol. Se puso como una furia. Tiró toda la comida, destrozó el vestuario, rompió una puerta... ¡Y todo por unos pocos M&Ms marrones!
El aprendizaje viene ahora.
Realmente, los Van Halen no eran (tan) maniáticos, pero sí muy astutos. Como ellos mismos no podían comprobar en detalle todo el montaje, esta cláusula les servía para asegurarse en un instante de que el contrato había sido leído “de pe a pa”. Entero. Sin dejar una coma. Y esto les aseguraba que el escenario, las luces, el sonido y el sinfín de cosas técnicas del concierto cumplían con sus estándares.
Algo parecido nos pasa en clase. A veces, el alumnado lee tan solo una parte de la información. O no pone la suficiente atención. ¿Qué podemos hacer? Aplicar la cláusula Van Halen.
Una posible dinámica puede ser darles 3-4 folios llenos de un montón de preguntas e instrucciones. Algunas de ellas pueden ser absurdas: tócate la oreja derecha, escribe tu color preferido, suma 2+2…
La idea es que, entre todas esas preguntas, se encuentre la cláusula que les diga algo como: “Solo tienes que responder la pregunta 1 para acabar la actividad”. Y que la pregunta una 1 sea poner su nombre.
Las personas que se lean la información antes de comenzar a responder (ejem, nadie, ejem), acabarán en unos pocos minutos. Las personas que comiencen la actividad sin leer lo que se les pregunta, cuando lleguen a la cláusula, se echarán las manos a la cabeza.
¡Vamos al lío!
PD: Esto también es muy interesante para las convocatorias de claustros o información que se nos envía como docentes. Pero en este caso me ahorro las ideas.
💭 Edu reflexiones
La frustración
Intento evitar los temas virales. Al menos, la semana en la que lo son. Hoy vamos a romper con esta rutina hablando del vídeo en el que una niña no es capaz de mantener el Hula hop (@TheFigen_) en su cintura y el aparece su padre para, sin que ella lo sepa, hacerle creer que lo ha conseguido.
La situación da pie a analizar diversas cosas que voy a dejar de lado esta vez: (1) Otra vez la imagen de una menor vuelve a circular por redes de forma imparable. (2) El contexto (@MoisLlorente). ¿Es todo un montaje? ¿Qué hay detrás de ese gesto? (3) La gestión del aprendizaje. ¿Cuánto tiempo lleva la niña intentándolo? ¿Se le han guiado y ofrecido herramientas para un apredizaje progresivo? (4) Su desarrollo. ¿Está preparada físicamente y psicomotrizmente para mantener el Hula hop?
Cada vez más, aunque esto puede ser un sesgo, nos es más difícil gestionar y tolerar la frustración. Y es algo preocupante teniendo en cuenta que en la mayoría de ocasiones perdemos. Es más, diría que perder es lo natural. ¿Cuántas actividades no han tenido el efecto que esperabas? ¿Cuántos futbolistas llegan a ser profesionales? ¿Cuántas relaciones no han funcionado? ¿Cuántas veces no has entendido un concepto? ¿Cuántas veces has recibido un “no”?
Se hace urgente ayudar al alumnado a la gestión de sus emociones y pensamientos ante la adversidad. Ante el fracaso. No sé muy bien cómo, ni cuál es la mejor forma (apuntado para aprender y tratarlo en ediciones futuras). Pero cabe recordar(nos) que ganar es lo raro.
Perico Delgado tuvo que perder (o no ganar) 11 Tours para salir campeón en solo uno de ellos. Y lo acompaño de una de sus reflexiones: “Estamos enseñando a ganar, cuando deberíamos enseñar a perder” (@crespo_lluis).
¿Sabes cuántas faltas ha tirado Leo Messi en partidos oficiales con el Barcelona? 497. Y de ellas ha marcado 46. Sí, “solo” 46. Los/as futboleros/as entenderéis que es muy buen número. Mucho. Pero es que desde su debut el 2004 hasta el 2009 no metió ninguna. Cero.
Por eso la importancia de conocer, gestionar y sobreponerse al fracaso. Porque es, me atrevería a decir, “el pan de cada día”. Eso sí, sin romantizarlo, por favor.
🔛 Ampliación. Ya hablamos de fracaso y frustración en la Edición 129 y Edición 154
Exponerse para la mejora
Este año me gustaría publicar un libro junto con mi alumnado con las leyendas que se han inventado sobre su pueblo. Con el fin de hacer el proceso más significativo, le pedí a una amiga que hiciese el papel de editora.
De este modo, las criaturas le enviaban sus leyendas por email, tras haberlas trabajado en clase, y ella les devolvía una serie de comentarios y recomendaciones para editarlas y mejorarlas.
El pasado domingo nos reunimos Trini -la editora- y yo para intercambiar visiones y pactar cómo abordariamos la corrección posteriormente. Sentados en el sofá a la luz de la estufa de leña, comenzó a sacar las leyendas llenas de anotaciones, flechas y cambios. ¿Tan mal están?, pensé.
Trini comenzó a analizar la forma de las leyendas, los aspectos imprescindibles que deben contener, la contextualización, los elementos, etc. Es decir, que aunque estaba hablando de las leyendas, también lo estaba haciendo de mi trabajo en clase.
No te voy a mentir. Al principio mi ego se notó tocado. Por mi cabeza pasaron a toda velocidad mil pensamientos que me decían que Trini, consciente o inconscientemente, creía que en el aula el trabajo había sido malo. Se me habían pasado por alto los elementos más esenciales para que las leyendas sean eso, leyendas.
No sabía ni donde meterme.
Cuando salí de su casa y me senté en el coche se me escapó una pequeña sonrisa. Trini había pegado un gran golpe de realidad a mi ego y a un trabajo que, desde mi opinión, era bastante decente. Eso me recordó lo mucho que (me) queda por aprender y la importancia de exponerse, no solo a uno mismo, sino también a compañeros/as y amigos/as que puedan aportarnos.
🎒 Para tu mochila
🔳 Minecraft puede ser una buena herramienta para trabajar las figuras geométricas. Aquí un ejemplo
✒ "Dame un verso", para trabajar y repartir poesía en la escuela (@Biblio_LaCister)
⚗ Si eres profe de Física y Química, esta nueva sección con diversas prácticas de laboratorio para ESO y Bachiller te puede interesar (@fqmente)
💭 Jugar con las palabras siempre puede ser una buena opción. Aquí una actividad para trabajar el verbo (@unprofedelatin)
🈺 Web para crear mensajes codificados en un instante (Visto en @alehoppp)
🔢 "Consigue 30", ¿cuántas operaciones diferentes puedes hacer para conseguir este resultado? (@CarlesGranell4)
💊 (VAL) Sepsis, un juego de cartas para trabajar en ESO o Bachillerato la base biologica de las resistencias a los antibióticos (@cescayora)
🎡 Combinar el área de arte con el de robótica me parece algo excepcional. Sin duda entra en la lista de mis "To-do" para el año que viene (@carlosmallo)
🎾 Principios para el diseño de patios coeducativos (@A_IvanRodriguez)
🔺 Si estáis trabajando Egipto o pensáis hacerlo, este artículo te puede servir de ayuda y descubrirte varias herramientas interesantes (@CdeHerodoto)
🤝 Para tu claustro
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¡Hasta la semana que viene!